Hay historias rudas, de esas tipo Carlos Pinto que por suerte no son tan cercanas, al menos por ahora.
Sí hay algunas que son durísimas, y cada vez que las recuerdo no logro comprender la motivación, pues las y los afectados, (mis amigas y amigos), son personas que no merecían tanta crueldad. Es decir, quizá el fondo de la historia es válido, pero, ¿ de ESA forma?
Esta semana ha sido fuerte al respecto, pues me he enterado de algunos detalles escabrosos de esas historias, y atando cabos, de alguna forma también pude armar el rompecabezas de la mía. Nadie saca cuentas alegres después de darse cuenta que te han visto la cara... por años.
Al menos tenemos certeza de que esos tiempos terminaron, y si todo sale bien, no volverán.
Si existe alguna coincidencia, es sólo parte de mi creatividad.
Pata
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